Ante la desmedida y brutal represión sufrida por los jubilados que se manifestaron en las inmediaciones del Congreso de la Nación este pasado miércoles 12 de marzo, desde la Asociación de Médicos de la República Argentina expresamos nuestro total repudio a la violencia y agresiones que sufrieron quienes reclamaban legítimamente. Es inadmisible la violencia ejercida por un gobierno insensible que ordena para esto a las las fuerzas de seguridad, cuando su deber es cuidar a la población.
Los jubilados vienen siendo castigados a diario con el valor de sus haberes que los somete a vivir en la pobreza, y este ataque, en lugar de mejorar su situación, debilita su reclamo por ingresos justos después de toda una vida de trabajo.
Un gobierno despiadado y violento que debería garantizar el derecho Constitucional a la protesta salió a reprimir de forma feroz y con una fuerza desmedida, que produjo daño grave a decenas de compatriotas jubilados e hirió de gravedad a un trabajador de la prensa que se encontraba registrando esta brutal represión.
Vemos con preocupación que los gobernantes en lugar de reconocer los daños producto de la represión, justifiquen este accionar.
La protesta por salarios justos y una vida digna es un derecho.
