A raíz de la difícil situación que vive nuestra nación, con una permanente caída del salario del equipo de salud en general y en especial del trabajador médico, desde nuestro Sindicato Médico AMRA solicitamos con urgencia a las autoridades nacionales y provinciales una urgente recomposición salarial para todos los subsectores de la salud ya que, tal cual venimos manifestando, nuestra situación se agrava permanentemente, en especial en los últimos 8 años. En este sentido, exigimos que se deje de lado la discriminación salarial en sectores estatales, fundamentalmente municipales, provinciales y nacionales.
Por otra parte, y atentos a este momento por el que atravesamos, vemos con muchísima preocupación el crecimiento cada vez mayor de la precarización, sobre todo, en el subsector privado con empresas monopólicas de salud que se agrupan en cámaras provinciales y nacionales, que evitan dialogar con nuestra organización -sin reconocer la decisión de los trabajadores afiliados- y se inclinan por pactar convenios con sindicatos que les son funcionales a sus mezquindades.
Por último, también, exigimos que se establezca un solo valor para la hora médica con actualizaciones permanente de acuerdo a los guarismos que marca el INDEC y que surja de un cálculo de tres canastas básicas y media; ese valor dividido por 154,8 horas mensuales, lo que hoy daría un valor de $4.323 de bolsillo la hora médica. A igual trabajo, igual salario. Esta propuesta fue planteada en la paritaria de la Provincia de Buenos Aires, la que no fue acompañada por el resto de los sindicatos, hecho que nos demostró que nuestra postura en el valor de sueldos era realmente justa. Este valor haría que el trabajador de salud pueda ir dejando el pluriempleo, que le aumenta la morbilidad 15 años antes que a la población general.
Vale la pena recordar que todo esto lo pedimos en un contexto en el que se nos dice que somos “esenciales”. Por esta razón intimamos a todos los empleadores -sin distinción- a que se nos trate como ESENCIALES EN TÉRMINOS SALARIALES y que cese la precarización a través de la discusión en convenios colectivos. En este contexto están sufriendo el trabajador de salud y la salud pública en general por lo que, a partir de este momento, entramos en estado de alerta y movilización.