COMUNICADO – CONSEJO DE SECCIONALES DE LA PROVINCIA DE BUENOS AIRES
En estos días hemos hablado con las autoridades del Consejo Superior del Colegio de Médicos de la Provincia de Buenos Aires, dada la gran cantidad de consultas de nuestros afiliados acerca de la Resolución N° 1033/22 publicada por dicha institución, en la que se crea un valor compensatorio para recuperar los “gastos operativos del funcionamiento de los consultorios”, denominado GOC y que es voluntario. Las autoridades expresaron que el principal fundamento de recomendar ese cobro es debido a que diariamente se cierran fuentes de trabajo porque los colegas no logran afrontar los gastos fijos que esas pequeñas unidades de atención generan y que han sido y son una forma de atención a los problemas de salud que la comunidad padece.
Como organización sindical no nos cabe juzgar la resolución en sí, sino exponer las causas que llevan a tal medida dado que desde hace años venimos denunciando que los trabajadores de la Profesión Médica estamos sometidos al pluriempleo solo para asegurar la subsistencia en el orden remunerativo y poder constituir una canasta básica familiar profesional. En mayo del corriente año la CBA fue de 44496 pesos y la CBT de 99677 pesos, pero la del Profesional no calculada es mucho mayor porque la profesión exige cuestiones que no están ahí incluidas como la capacitación continua realizada en cursos, jornadas, congresos de las especialidades, pago de un seguro para trabajar, matrícula y caja de profesionales entre otros. Todos estos esfuerzos extras quede claro son para poder brindarle a la comunidad la mejor atención profesional posible.
El Sindicato AMRA, una vez más, denuncia que las y los médicos trabajamos precarizados en todos los subsectores que atienden a la población, que en su gran mayoría las remuneraciones están debajo de la linea de pobreza y ni que hablar de una “Canasta Básica Profesional”. Por estos motivos debemos tener varios empleos para cubrir estas necesidades pecuniarias. Las médicas y médicos residentes no se contratan como trabajadores profesionales en formación sino como becarios y existen las concurrencias, un claro trabajo esclavo para la Organización Internacional Del Trabajo (OIT). La Argentina no tiene un sistema de salud, tiene un modelo fragmentado de atención de las personas enfermas y es poco lo que realiza para la prevención. Para el caso, miremos los indicadores de indigencia y pobreza que desde hace décadas marcan nuestra realidad social: hay médicos que en este estado de situación en las zonas alejadas o impenetrables del conurbano bonaerense cubren la atención en sus consultorios de las personas que lo necesitan, ahí donde el Estado no está tan presente.
Resumiendo, el “GOC” en sí no es una solución para la Salud Pública, ahí debe estar la política sanitaria, esa que se realiza desde las oficinas y no desde los territorios como lo realizaba Carrillo y Oñativia, entre otros. Esta compensación, el GOC, que surge de una entidad de Ley, solo muestra que las y los médicos vivimos sometidos en el pluriempleo trabajando entre 12 a 14 horas por día a la edad media de la profesión, precarizados laboralmente en todos los subsectores de la atención, enmarcados en la economía informal, con cámaras patronales que no se sientan a negociar Convenios Colectivos de Trabajo y que como ya mencionamos hasta el hartazgo, son sustituidos por convenios civiles y comerciales entre las diferentes patronales y las instituciones intermedias existentes de hecho hace décadas. Esta realidad ocurre en todos los subsectores de la atención como obras sociales, sindicales, IOMA, PAMI, empresas prepagas, clínicas y sanatorios y en las mismas estructuras Estatales de las diversas Jurisdicciones territoriales. Una vez más los opinólogos juzgan pero no dan la cara para mostrar y desnudar esta realidad.